10 diciembre 2005

Inconcebible

Segundo día en urgencias de La Paz y comienzo a pagarlo. Ves muchas cosas, te da tiempo a pensar muchas cosas y la indignación va increscendo. Hasta ahora, mal que bien, tenía cierto respeto por la sanidad pública. Después de mi incidente del otro día y estas dos jornadas en urgencias el respeto se ha ido al carajo. Como estoy calentito no me quiero explayar en detalles, pero mañana como siga viendo el mismo pasotismo, la misma desidia y la misma incompetencia voy a montar ahí dentro un pollo de cojones. Supongo que no servirá de nada, pero por lo menos me desahogo, que falta me hace. Solo un apunte. Ahí dentro somos putos números. Ni más, ni menos.