08 enero 2006

Todavía hay clases

He llegado hace un rato de la Ciudad Condal. Fin de semana utilizado en el conocimiento de mi señor suegro. Él también me ha conocido a mí. Empate a uno :-). Lo mejor del viaje ha sido la vuelta. No ha sido como otros regresos, con triste despedida en la estación, melancólicas miradas al cristal y algun que otro SMS cómplice. Esta vez ella ha vuelto conmigo. Esa es toda una novedad. Una estupenda novedad.



Y esta vez, pese a mis preferencias, hemos venido en clase turista (cinco horitas de Altaria). No están las economías para muchas alegrías, pero es que no es lo mismo ir en turista sin ella que con ella (puedes subir el reposabrazos central y eso da mucho juego). No hay color. Eso sí, hemos tenido que aguantar los berridos de sendos niños durante casi todo el trayecto. Todo tiene su inconveniente ...