28 marzo 2006

Tus ojos en el cristal

No se si os habrá pasado alguna vez. Vuelves del trabajo agotado, no solo física sino psicológicamente. Hay huelga de metro, un millón quinientas mil personas en un vagón abarrotado. Las estaciones pasan lenta y cadenciosamente. Tienes cuarenta problemas en los que pensar.



Y de repente, pegado al cristal de una de las puertas del metro, te miras a tus ojos y te preguntas ¿Que cojones narices hago yo aquí?, ¿Esto es calidad de vida?. ¿En que me he equivocado para acabar así? ¿Porqué no me hice leñador en un pueblecito perdido?

Luego, cuando sales al exterior, se te suele pasar y tal ... Cosas de urbanita asalariado.