12 julio 2008

Kaiser belcebú

Cada vez que posteo sobre el perrón, todos decís que es adorable, muy achuchable, un osito de peluche, etc etc etc. Y vale, acepto barco, El perrón es bastante achuchable, como podemos ver en este gráfico:


Pero cuando se pone belcebú, el bicho aprovecha las noches, y con nocturnidad, alevosía y premeditación, cuando sus dueños cogen el sueño, empieza a hacer de las suyas. Pone el modo [Belcebú ON] y comienzan las trastadas. Una cartera muy cerca del filo de la mesa y estas son las consecuencias.


Muy achuchable sí, pero cuando hace estas cosas, y no es la primera vez, se convierte en un bandarra y un autentico cabronazo :-). Ahora me va a tocar pedir una tarjeta nueva, con la pereza que me dan las gestiones bancarias. Menos mal que no se cebó con el DNI, tiemblo solo de pensarlo. En cuanto a la cartera, que ya estaba amortizada, me preocupa menos. He estrenado una nueva que me regalaron hace poco. En fin ...

PD: Ligero y tosco trabajo de photoshop en la última foto para preservar mis intimidades.

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